Este espacio es de gran importancia, pués nos permite acercarle información respecto de los aloes, a aquéllas personas que no pueden acceder a la misma en literatura u otro medio informativo.
Todos relacionamos la palabra "aloe" con mejor salud, bienestar, curación; con algo positivo. Usted le dice a alguien: "aloe" y aunque no sepa de que habla, le dirá que es algo bueno para la salud. ¿Por qué esa respuesta? Simplemente, porque el ser humano viene usando los aloes en su beneficio desde tiempos inmemoriales. Ese conocimiento ya forma parte de nuestra cultura.
Directa o indirectamente, por propia experiencia o referencias, en algún momento, ése conocimiento se transmite de persona a persona. Obviamente, los que experimentan con el aloe y obtienen buenos resultados, desean que otras personas disfruten de los mismos beneficios, por lo que comentan, y sin quererlo, hacen difusión.
Muchos amigos nos consultan por teléfono, e-mail o incluso redes sociales. Una de las preguntas más frecuentes es:
¿Todos los productos con aloe producen los mismos resultados?
A lo que les contestamos que no.
Lógicamente, aunque todo el aloe usado en los productos comerciales es de excelente calidad en orígen, hay que tener en cuenta su presentación, cantidades, y principalmente, el proceso al que se somete al aloe desde que se cosecha hasta que se envasa para la venta.
No es lo mismo pasarse en la piel una crema con aloe, que hacerse masajes con aloe puro. No es lo mismo una bebida refrescante con un 0,5% de áloe, que ingerir diariamente 45 cc de aloe puro. No es lo mismo beber nuestro aloe bebible (98,5 y 99% de aloe puro), que beber agua con aloe o aloe diluido.
Debemos considerar especialmente, el proceso de industrialización y estabilización del aloe, ya sea para uso cosmético, terapéutico o alimentario. Desde un jugo de aloe para uso cosmético, o un Gel de Aloe Bebible para uso nutricional, hasta un aloe en polvo natural o liofilizado, todos deben ser sometidos a procesos industriales y de conservación, y si ése proceso es más simple y con menos agregados químicos, mejor será el producto obtenido.
Los aloes tienen características propias que las hace parecer "plantas de otro planeta". Se reproducen tanto de semillas como de plántulas que brotan de yemas en las raíces y en los tallos.
Los aloes no mueren mientras tengan condiciones favorables de temperatura, suelos, humedad, etc. Estos continúan viviendo y cumpliendo sus ciclos anuales de floración, acumulación de reservas, desarrollo vegetativo, etc. Tienen la propiedad de seguir creciendo, inclusive floreciendo, aunque les hayan cortado y separado de su tronco o raíz, a expensas de las reservas acumuladas en las hojas, por un período bastante prolongado. Por éso, en climas secos y de tierras áridas, los aloes sobreviven alimentándose de sí mismos.
Sí, ¡como lo lee! El aloe puede sobrevivir alimentándose de las reservas nutricionales y energéticas acumuladas en el gel o mucílago dentro de sus propias hojas. Cuánto más edad tenga la planta, más grandes serán sus hojas, cuánto más grandes las hojas, mayor contenido de gel o mucílago. Cuánto más gel, mayores reservas y más cantidad de vitaminas, minerales y otros nutrientes acumulados. Para elaborar el "Gel de Aloe Bebible", "Aloe of Uruguay®", usamos plantas de más de 6 años, que tienen buen contenido mucilaginoso y muy buenas reservas acumuladas, lo que hace que nuestros productos sean de gran calidad y efectividad.
Volviendo a los procedimientos de industrialización y estabilización, les comentaba que, cuanto más simples y con menos agregados, más natural es el producto obtenido. Para elaborar nuestro "Gel de Aloe Bebible", "Aloe of Uruguay®", cosechamos las hojas del aloe en la plantación (22 hectáreas en producción) de Punta Espinillo, las clasificamos, lavamos a máquina y envasamos en cajones plásticos lavados. Estas hojas se transportan a nuestro laboratorio en Montevideo y se procesan. Les extraemos el mucílago o gel interior, y al gel le extraemos "la aloína" con lo que el producto se puede usar sin limitaciones ni contraindicaciones de ninguna especie. Le agregamos un mínimo de conservantes para que se estabilice sin perder ninguna de sus propiedades, conservando al máximo su naturalidad.
Recordemos que los conservantes, o son germicidas o acidulantes para crear un medio ácido en el que los gérmenes no prosperen, y que si bien conservan los alimentos por un período más prolongado, también alteran la originalidad del producto y sus componentes.
La idea es ofrecer al consumidor, un producto lo más natural posible y con todo su potencial, de ahí la poca cantidad de conservantes y la necesidad de refrigerar el gel una vez elaborado y entregado. Por éso, ante la pregunta del principio de si " todos los productos con aloe producen los mismos resultados", contestamos que no... pués cuánto más natural más sano, más intacto, con mejores propiedades alimentarias y terapéuticas, y a mejores propiedades mejores resultados.
Por ésto, amigo lector, apueste al aloe y ganará una "vida más sana, mejor y con más energías".
Por Carlos E. Tato Krabs.